MEMORIA 2020

JAM-TAN

¡2020 ha sido rarííísiimoooooo! Qué os vamos a contar…

El Proyecto Jam-Tan encaraba el 2020 con mucha fuerza. El Staff (equipo de coordinadores del proyecto) se reúnen durante todo el año para organizar, coordinar y atender el proyecto. En las Navidades de 2019/2020, a Gloria, coordinadora del proyecto en Barcelona, le surgió la oportunidad de ir a poder reunirse con ellos, cosa que sólo pasaba, hasta ese año, en verano. La ilusión de verse y poder compartir dos veces en un mismo año motivó mucho a todo el equipo. Y durante esos días trabajaron para mejorar el proyecto, evaluaron el inicio de curso y compartieron necesidades y esto dió más fuerza para encarar el final de curso. 

Pero llegó la pandemia, y todos los objetivos, tanto los ya activos hasta el momento como los nuevos, y los planes para llevarlos a cabo se vieron truncados.

Eso sí, aparecieron otros.

PROGRAMA DE PROTECCIÓN

Durante el inicio de curso los objetivos marcados por el proyecto seguían activos. 

Durante las reuniones que tuvieron lugar en las navidades se evidenciaron aspectos a mejorar relacionados principalmente con la comunicación y la transmisión de comunicación sobre el seguimiento de los niños y niñas del programa; y sobre la falta de compromiso de las familias con el estudio de sus hijos y con el propio proyecto (aspecto del cual ya se había hablado en verano de 2019 pero sobre el que aun no se había planificado el plan de acción para conseguirlo). 

Se diseñó la organización necesaria para que los informes de seguimiento de los niños y niñas llegasen a tiempo a Salif, el coordinador de los proyectos con los que ASF colaboramos en Senegal, y al equipo español, Alegría Sin fronteras, y así poder dar respuesta a las necesidades detectadas por los tutores. 

En cuanto a las familias, al inicio de curso, tres niños del programa abandonaron los estudios por causas familiares o contextuales. Por ello, el Staff sugería hacer reuniones de sensibilización sobre la importancia de la educación y de la colaboración con el proyecto. 

Pero todas estas propuestas no pudieron llegarse a materializar. Con la llegada de la pandemia y el estado de alarma correspondiente se suspendieron las clases y se confinaron las famílias. Y empezaron a surgir serios problemas de acceso a los alimentos básicos y a los productos de limpieza y desinfección. En Senegal no existe la educación on-line, con lo cual los niños estuvieron desconectados de la escuela y del aprendizaje durante siete meses. Esta situación generó un aumento significativo de la violencia y de los embarazos prematuros en la población. 

Frente a esta situación, el Staff propuso: Repartir un kit alimentario y de limpieza a cada familia, y organizar sesiones educativas a través de la radio local. 

El reparto de los kits se llevó a cabo con muchas dificultades, pero fue de gran alivio para las familias de los niños y niñas y también de los tutores, a los que el equipo de Barcelona decidió incluir como beneficiarios de dichos kits. En los momentos en los que el confinamiento se relajaba, los tutores acudían a las casas de los niños para animarlos a realizar tareas educativas sencillas. A pesar de todos los esfuerzos, al llegar el verano siete niños y niñas del proyecto habían abandonado el sistema educativo por motivos como embarazos, bodas concertadas o internados en escuelas coránicas. 

Como era de esperar, ese verano, las colonias no se pudieron realizar

FORMACIÓN

Tras el éxito de la formación realizada en 2019, se organizó una segunda tanda para el 2020. La formación teórica debía realizarse en el mes de abril. En ella habían de participar 40 jóvenes pertenecientes a diversas asociaciones de distintas localidades del senegal. Con el objetivo de generar una red de sinergias entre miembros activos de la población que trabajan por y para la educación.  

De nuevo, a causa del confinamiento la formación se canceló.

GRANJA DE POLLOS

Dado el buen rendimiento durante el 2019, en la reunión de las navidades el Staff planteó la construcción de una pequeña granja en un terreno cedido para el proyecto. El ayuntamiento se comprometió a colaborar económicamente y cada miembro del Staff quería aportar su contribución en forma de material o de trabajo. Las obras debían iniciarse en el mes de abril. Como no, nuestro querido coronavirus, dió al traste todos los planes.

A pesar de ello, Fatalla Diao, miembro del Staff, siguió produciendo y vendiendo pollos en la granja del colegio para el proyecto. La granja ha dado beneficios que de momento no han estado destinados a ninguna actividad, a la espera de que se decida su utilidad. Podemos decir que ha sido la parte del proyecto que se ha mantenido con éxito a pesar de la situación. 

 

PARA EL 2021

En el momento en que se acaba el verano continua todo colgado, de hecho, las escuelas no abren  cuando es previsto. Así que el equipo queda a la espera de ver cómo la situación avanza y qué nos va a deparar.  

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